la larga tradición ggráfica del país, el refinamiento de sus artistas, la síntesis de la sensibilidad oriental con el gusto occidental introducido desde la época Meiji, se alían con notables cuialidades técnicas y caracterizan la producción nipona. Los temas propios de las estampas japonesas, tanto los tenues paisajes de la lienas esquematizadas como las escenas eróticas que conjugan violencia y plasticidad, todo eso aparece en sus fotografías. Sin caer en un orientalismo pintoresco, , el tratamiento que estos artistas dan a sus imágenes conlleva un sello incofundible.
Desde los personajes aislados en paisajes desnudos de shoji ueda hasta las obras tan sutiles y casi abstractas de jne shiraoka, residente en parís cómo kaichi tamura, cuyos temas recuerdan cierta fotografía norteamaericana sin que le falte un enfoque muy oriental. Los japoneses tratan también el denudo, con un toque voyeur y sadomasoquista en la obra de nobuyosi araki y por eikoh hosoe, mundialmente conocido desde sus desnudos que recogio el libro embrace.
La producción japonesa reviste gran interés y merece ser tomada en cuenta, los actuales fotógrafos nipones aparecen cada vez más entre la avanzadilla de las mejores muestras internacionales.
fotografia de shoji ueda. El próximo fotografo, que analizaré, y esta entrada cómo un vano intento de meternos en la mentalidad oriental, vano porque es mucho más simple y a la vez complicado entenderlo, la palabra clave es contemplación.
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