domingo, 17 de mayo de 2015

la niña de luto

1964 españa. 85 minutos. comedia.director: manuel summers.  guión. Manuel Summers, Tico Medina, Francisco Summers, Bernardo Ballester, Pilar Miró. música: antonio pérez olea. fotografía: francisco fraile. productora: impala. Reparto: maria jose alfonso, alfredo landa, pilar gómez ferrer, vicente llosa, jose vicente cerrudo, carmen santonja.
sinopsis:
Rocío, hija de una humilde familia andaluza, está muy contenta porque llega el final del luto que ha de guardar por la muerte de su abuela. Por fin podrá casarse con Rafael, su novio, ya que tuvo que aplazar la boda por el fallecimiento. Pero al día siguiente, su abuelo come demasiado en un bautizo, y muere de una indigestión. De nuevo, Rocío tiene que guardar luto y aplazar la boda, pero entonces Rafael, cansado de la situación, le propone huir y casarse lejos de allí. Rocío no se atreve a alejarse de los suyos porque es una mujer tradicional.
 Su primer trabajo, Del rosa al amarillo, Concha de Plata en el  festival de cine de san sebastián, fue seguido de otros como La niña de luto o Juguetes rotos. Por desgracia, el escaso reconocimiento de la mayoría de los filmes de su primera etapa motivó un progresivo cambio de registro hacia un cine más comercial, como el caso de Adiós, cigüeña, adiós, sobre una pareja de padres adolescentes, que hasta tuvo una secuela titulada El niño es nuestro.
 Summers se vale de un estilo totalmente rompedor a la vanguardia europea. Mediante una aplicación de algunos aspectos de la nouvelle vague que Jean-Luc Godard ha ido usando en films de esa misma década, tales como la transgresión musical o un montaje que evidencia la artificiosidad del cine, nos introduce en un mundo muy distinto al que los franceses no tienen acostumbrados. No es un París moderno ni una película de cine negro. Es la España rural de los sesenta, un mundo de lo más bizarro, castizo, cazurro, chotuno y olvidable. No puede sino chocar este contraste de cine como arte a la vanguardia de Europa con un mundo rural tan anclado en el catetismo de una España cuya moralidad era regulada por Franco y la Iglesia
 Tenemos a un Jean Paul Belmondo y una Ana Karina españolizados, enjaulados en un mundo que no es el suyo, que deambulan sin un rumbo fijo, que sufren por su desorientación. La película ahonda en un elemento de este mundo irracional, uno de tantos, que es el luto tras la muerte de un familiar. En este pueblo de la España profunda se respetan las tradiciones y entre ellas está la de no relacionarse (festejar que dirían en mi pueblo) con el pretendiente en el periodo de luto. Romper una de estas tradiciones tan arraigadas no trae sino habladurías y malas caras por parte de los vecinos. Es indignante que dos personas que se aman estén obligadas a no tratarse por culpa de algo que les es impuesto, pero aun más irritante es que toda la paletada hable mal de ellos a sus espaldas e incluso deje de contar con sus servicios laborales, lo cual puede condenar a la pobreza o al exilio al prójimo.
esta es una película de Landa antes de pasarse al Landismo. Es una película que ofrece un retrato amable de la España de Provincias, que tiene una muy buena puesta en escena, un guión creible, y buenas interpretaciones, además de ser una película en color. Es sobre una España y una nueva generación que esperaba con paciencia que el día de Mañana llegará.... pero nunca llegaba y había que vivir para aparentar las formas, el famoso que dirán español... un tema muy nuestro, aunque quizás ya muy visto, con deciros que ya os subí cine republicano que trataba esta temática, es un tema muy castizo y aún actual.
 https://www.youtube.com/watch?v=IuQKSs5cUOg
trailer

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