1950 España 76 minutos. Director: Ignacio Aquino. Guión: Juan Lladó,
Manuel Bengoa. Música: Augusto Algueró hijo productora: Ifi producción.
Intriga. Reparto: José Suárez, Soledad Lence, Alfonso Estela, Manuel
Gas, Barta Barri, Pedro Córdoba, Fernando Vallejo, Maruchi Fresno,
Isabel de Castro, Carlos Otero, Mercedes Mozart.
Sinopsis.
Fernando sale de la Escuela Superior de Policía de Madrid con el título
de agente. Está impaciente por comunicárselo a su tío y, mientras lo
hace, entran en el establecimiento unos atracadores y roban la caja. El
novato agente pide a sus superiores que le dejen hacerse cargo del
suceso, pero éstos se muestran inflexibles y le asignan el caso de un
robo que ha cometido un lavacoches en un garaje
La larga filmografía de Iquino demuestra la habilidad de éste para
adecuarse a los gustos y modas imperantes entre el público, y de ahí que
realizara, a lo largo de la misma, películas de todos los géneros
(comedias, cine negro, musicales folclóricos, destape, etc). Su
condición de productor eficiente a la par que realizador eficaz, unido a
su instinto comercial y político, propició que gozara de más
oportunidades que otros a la hora de llevar a cabo sus proyectos.
En 1950, casi al tiempo en que aparecía el otro título referencial del
balbuciente cine negro español ("Apartado de Correos 1001", de Julio
Salvador), Iquino producía y dirigía esta película, que amparada en la
acostumbrada loa a la Dirección General de Seguridad y a las fuerzas del
orden, cuenta la historia de un policía novato que, aparentemente
destinado a un rutinario primer caso, se ve casualmente complicado en un
asunto de mayor envergadura, con robos y asesinatos de por medio.
El argumento bebe de los clásicos norteamericanos de los años cuarenta,
especialmente los que optaban por encomiar la labor de la policía, como
"T-Men" de Anthony Mann; la historia, bien hilvanada, con la tradicional
dicotomía entre buenos y malos (profundamente subrayada por los
diálogos y las actitudes), está llena de ritmo, si bien presenta algunas
inconsistencias (la facilidad con que se confían los malos al novato
infiltrado), así como algunos recursos discutibles (la voz en off, casi
siempre innecesaria, o parte del flashback). Pese a ello, la película
resulta siempre entretenida, eficaz en el retrato de la violencia, y muy
acertada en la ambientación y localizaciones, situadas la práctica
totalidad de ellas en Madrid -hay un breve intervalo rodado en
Barcelona.
La realización llama la atención por la elección de los puntos de vista,
ángulos y planos; con frecuencia la cámara parece estar semioculta tras
los personajes y los objetos, como si la mirada del director (que es
también la nuestra) se volviera furtiva, acechante. Además, opta por un
punto de vista bajo, especialmente en las conversaciones entre
personajes, los cuales, tomados en ligero contrapicado, se encuadran en
planos medios, siendo este estilo totalmente novedoso en la
cinematografía española. La fotografía opta por el realismo, aunque sin
descuidar los efectos lumínicos característicos del género, que se ponen
de relieve en el interrogatorio, la paliza, y la estupenda secuencia de
persecución y acoso en el edificio en construcción.
Aunque a algunos mi nota pueda parecerles excesiva, creo que hay que
reconocer las virtudes de uno de los filmes pioneros del género negro en
España, que es el caso que nos ocupa, y disculpar (o al menos entender)
el encomio que realiza de las fuerzas del orden, circunstancia que,
aparte de ser utilizada como medio para promocionar y "blindar" el
filme, no deja de ser un recurso argumental tomado del más puro cine
negro estadounidense.
https://www.youtube.com/watch?v=KSZMHPl3fTc
trailer
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