sinopsis: Un grupo de bandidos asalta un tren robando un millón de dolares en oro. Cuando el líder se escapa con el botín es perseguido por un caza-recompensas, un banquero y un bandido solitario.
Que Castellari es un cínico lo sabe cualquiera que se haya enfrentado a cualquiera de sus creaciones y recreaciones. "Voy, le mato y vuelvo" es un exploit tan gratuito de la trilogía de Leone que hasta se disfruta, con un reparto muy exótico: italianos, uruguayos, norteamericanos, mexicanos, alemanes, españoles... Algo muy habitual en un sub-género tan bastardo como el SW.
El argumento es tan viejo como cagar en cuclillas: tres forajidos en busca de un tesoro en Mexico (un gallardísimo Gilbert Roland, que eclipsa totalmente a George Hilton y Edd Byrnes en los papeles principales), y las innumerables trabas que se van poniendo entre ellos en el proceso. Las similitudes con "El bueno, el feo y el malo" ("Il buono, il brutto, il cattivo", Sergio Leone, 1966) son innumerables, y me temo que el proyecto en sí fue ideado a rebufo claramente del clásico de Eastwood, Van Cleef y Wallach; no le funcionó mal a Castellari el invento, de hecho un año después estrenaría "Mátalos y vuelve".
Con un doblaje vergonzante -se solapan los gritos en italiano del original con los doblados, y en una misma escena se puede escuchar "Fuoco" y "Fuego" sin que pase ni media- y una canción principal deliciosamente kitsch (banda sonora de Francesco de Masi), a pesar de estar pésimamente cerrada, "Voy, le mato y vuelvo" es un producto simpático, agradable de ver, por mucho que Castellari y los distribuidores del DVD en España se empeñen, respectivamente, en marearnos con unos movimientos de cámara y unos tijeretazos en los planos totalmente aberrantes. Interesante
me gustó mucho el comienzo, el cazarecompensas que ya contrató al enterrador y mata a los forajidos, y después el asalto al tren, pero después de esos 20 minutos bastante buenos, llega la decepción absoluta de esta cinta, y es que es una copia de otros spaguettis. Los 3 protagonistas nos recuerdan a la versión cutre de la trilogia del dollar, intento emularlo pero con una dósis de humor, y no lo consigue.Al menos en el final, aunque algo lioso, y parecido a las comedias de pajares y escenso, nos sorprende algo el final con los 3 protagonistas.
sobre el reparto, Hilton está sobreactuando... la verdad es que nunca me gustó nada este actor, sólo rescato edd byrnes en el papel de Monedero, un bandido sin escrupulos, el actor hace lo que puede, pero el guión es muy flojo, y al final su papel es casi más cómico que otra cosa, muy buenas intenciones en la cinta, pero sin originalidad y con numerosos defectos.
y es una pena porque se nota que la peli tenía presupuesto. Hay un tren, hay algo de originalidad con la típica pelea humoristica en los baños, aunque queda ridicula con puñetazos que no llegan a la cara, también hay los clásicos tiroteos aunque quitando el del tren, todos bastante descafeinados, en definitiva castellari tiene mejores pelis que esta.
el último duelo entre los 3 caraduras que buscan el oro, flojisimo. Y es que uno de los problemas de la cinta, es que a medida que avanza se torna humorística, y la acción va perdiendo fuelle. No sabes si es un spaguetti humorístico o un producto serio. Se queda a medias y no satisface ni a los amantes del spaguetti serio ni a los amantes ( si es que hay alguno) del spaguetti humorístico.
La acción la llevan entre estos 3, pero sin ninguna gracia ni chispa, con demasiados chascarrillos baratos y poca creatividad. Una copia muy mala del bueno el feo y el malo, pero entretiene algo y esste nulo ejercicio de spaguetti puede llegar a ser perdonable, como dije sólo los 20 minutos primeros de la cinta merecen la pena. El resto, un sinsentido auténtico, una ida y venida de los protagonistas sin ningun sentido, y pocas ganas de darle un giro al guión. Peleas minuteras que no aportan nada, dialogos sin sentido, y los 3 personajes centrales jugando al despiste e intentando vender a sus sus rivales por conseguir el oro, esto hace que el final carezca de lógica. Le daría un 5 por ser condescendiente.
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