Dedicado a sacar retratos callejeros, empezó a recopilar para sí, fotografías de la ciudad que recorría a dirario, escaparates, vendederores ambulantes, prostitutas, tiendas, calles y monumentos forman parte de una crónica de la ciudada a principios del siglo 20. LLegó a reunir 4600 placas u aunque al final de su vida ya era conocido entre pintores y escritores que le encargaban pruebas de sus fotos parisinas, murió en la miseria.
Benice abbot fotografa americana, adiquiriró los negativos de atget a su muerte. Atget no tenía pretensiones art´titisicas y recogía las imágenes del viejo parís, por el impulso que anima al fotógrafo nato. Riis y Hine tampoco pretendían fines estéticos, y sin embargo, sus imágenes permanencen entre las importantes de la historia de la fotografía.
Quizá más que las llamadas artísticas de la misma época, porque lo primero no sé proponían otra cosa que sacar fotos, mientras que los segundos intentaban equivocadamente equiparar fotografía y pintura.
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