Vamos a dar los últimos toques a todo el proceso, paso por paso y por orden para no dejarnos nada en el camino. Esta última explicación ya sirve para hacer las fotografías, podemos probar con algo grande y no muy pringoso como
un globo lleno de agua, ya tendremos tiempo de romper otras cosas:
- Antes de nada podemos hacer una prueba de disparo para comprobar que el flash salta cuando el perdigón impacta contra el disparador de papel de plata. Acordaos de sustituir o separar bien las dos hojas de papel entre uno y otro disparo para que no queden en contacto.
- Ya funciona el disparador y lo tenemos todo perfectamente alineado, así que colocamos al sujeto en el punto de impacto.
- Montamos la cámara sobre su trípode a una distancia prudencial para evitar que sufra algún accidente. Seleccionamos el modo manual, una apertura media f:4,5 ó 5,6, el tiempo de exposición en bulb y ponemos, de momento, el ISO más bajo. Como objetivo usaremos un tele medio, entre 70 y 135 mm estará bien.
- Instalamos el flash entre el sujeto y la cámara, en una posición más baja para que no salga en medio del encuadre, lo encendemos y ajustamos el selector de potencia a la mínima posible. Nosotros usamos 1/64 porque el flash no daba para menos, con esto conseguiremos un destello muy corto, pero ojo porque también dará menos luz.
- Enfocamos bien el sujeto en manual, no pongáis el autofocus porque se volverá loca cuando no haya luz, y hacemos una prueba de iluminación. Para ello apagamos la luz e iniciamos el disparo de la cámara en bulb, hacemos saltar el flash haciéndo contacto con un cable en las dos láminas y terminamos en disparo en bulb. Luego encendemos la luz y examinamos la prueba, si está subexpuesta habrá que acercar un poco más el flash o subir un punto la ISO. Haremos las pruebas necesarias hasta que esté correctamente expuesta.
- Llega el momento esperado. Cargamos la pistola, apagamos las luces, iniciamos el disparo en la cámara y “BAAANG“. Cuidado, antes de encender la luz y revisar el resultado hay que acabar el disparo en bulb para no quemar la foto. Si todo ha ido bien tendrás una hermosa instantanea de algo reventando, enhorabuena, es tu primera fotografía de alta velocidad.
En función de los resultados obtenidos se puede variar la distancia entre el sujeto y el disparador para congelar el momento un poco antes o después. Con sólo diez centímetros de diferencia las imagenes obtenidas son totalmente distintas.
Procesando las fotos y resultados finales
Lo interesante de estas fotos está en el sujeto y los trocitos que desprende, pero inevitablemente habrá otros objetos que se nos cuelan en el encuadre, fondo no lo suficientemente negro, soporte, disparador. Para realzar el sujeto y eliminar el fondo podemos hacerlo con un simple
ajuste de niveles. Para elimiar cosas indeseadas tendremos que recurrir al
tampón de clonar. En esta parte que cada uno se maneje como mejor sepa.
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