lunes, 5 de marzo de 2012

el corazón de las tinieblas de joseph conrad

El corazón de las tinieblas es la obra más simbólica de Conrad. Ambientada en el Congo que él mismo conoció en uno de sus viajes, y narrada por su alter ego, Marlow. La historia se estructura como un viaje que comienza en Bruselas, y continúa en la navegación por el gran  río africano hacia Kurtz, el rey de aquella selva negra, el dueño del marfil que de allí salía para Europa.  Obsesionado por la leyenda que rodea a este personaje, en su viaje a través de una naturaleza que lo abrumaba, Marlow sentía que hallaría río arriba alguna explicación terrible del significado de la existencia. El preludio de algo oscuro sonaba al compás de los tambores africanos.  Llegó al fin a su destino cuando Kurtz terminaba sin dignidad ni osadía, sin audacia y sin perdón sus últimos instantes de vida. Dicen que cada uno recoge lo que siembra; esa sombría leyenda había sembrado el terror entre los nativos y se iba reinando desde una cabaña rodeada de postes coronados por cabezas humanas.   Sus últimas palabras: “¡El horror! ¡El horror!”. Su vida había sido aquello. De vuelta a Europa Marlow descubre que Kurtz era un buen muchacho de pocos recursos que fue sólo a África para hacer dinero y poder así casarse con la mujer que amaba, una joven que idolatraba su memoria.  
Marlow dejó que la muchacha venerase igualmente al rey de las tinieblas; como todos hacemos muchas veces, aun sabiendo que dejar volar a los demás en la ingenuidad nos hace culpables de la perpetuación del odio, del infierno que nuestra civilización esconde, de las malas intenciones, del afán de poder, de la obsesión del éxito por encima del prójimo. Pero el corazón de Conrad no pudo callar esta historia para siempre, es por ello que parió con ella su mejor crónica. Aunque no por buena deja de ser agobiante.
el Kurz al que dió vida Marlon brando, más que darle vida lo inmortalizo en apocalipsis now, adaptación muy libre la de oliver stone, pero válida. Aún así prefiero el libro, disfrutar de esta obra maestra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario