lunes, 10 de junio de 2013

fotografía arqueológica

fuera del área de los museos y colecciones, la fotografía se aplica igualmente al exterior en monumentos y otros conjuntos artísticos. Desde los daguerrotipos del barón gros y el primer álbum de fotos realizadas en Egipto por maxime du camp, la aportación fotográfica ha sido considerable.
Los ejemplos son innumerables y por eso mismo resulta dificl establecer una lista de ellos. Tan sólo consultando el catálogo de los fondos fotográficos de la biblioteca nacional, se puede calibrar la amplitud de la documentación cubierta por la fotografía.
España tan poco celosa de sus logros no se preocupó de reinvindicar lo que, salvo nuevas noticias, fue una premiere mundial: en 1880 don josé escalante y gonzalez catedrático de historia natural del instituto de santander, iluminó las cuevas de altamira con sus aparatos permitiendo la toma de varias fotografias de las pinturas parietales.
La fotografía area se empela para localizar asentamientos de civilizaciones perdias que no se aprecian al nivel del suelo. La luz rasante del crepúsculo se utiliza para explorar un área geográfica interesante con la misma finalidad que la luz artificial para examinar la contextura de un cuadro. La luz rasante puede revelar la presencia de vestigios insospechados y permite localizar el lugar adecuado para emprender excavaciones. Pueden aparecer ciudades sumergidas bajo las aguas o fortalezas perdidas bajo la arena del desierto o la vegetación de la selva.
La fotogrametría es un técnica que permite determinar la dimensión de los objetos gracias a mediciones verificadas sobre la perpectivas de los mismos. Esta técnica además de su aplicación corriente en cartografía, se emplea también para estudiar monumentos y conjuntos arquitectónicos.

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